Un viaje por la historia medieval
Extremadura es una tierra rica en historia y castillos medievales que dominan el paisaje con su imponente presencia. Desde fortalezas árabes hasta construcciones cristianas de la Reconquista, recorrer los castillos de Extremadura es transportarse a una época de caballeros, reyes y leyendas. Hoy te propongo un viaje por 10 de estos castillos, repartidos entre Badajoz y Cáceres. Cada uno tiene una historia única que contar, y estoy seguro de que algunos te sorprenderán. ¡Ponte cómodo y acompáñame en esta ruta!

1. Castillo de Luna, Alburquerque (Badajoz)
Comenzamos por el majestuoso Castillo de Luna en Alburquerque, un monumento lleno de historia y que fue hogar de Don Álvaro de Luna, un influyente maestre de la Orden de Santiago. El castillo tiene cuatro recintos amurallados y destaca por su torre del homenaje, la cual se alza sobre un arco ojival y está compartimentada en cinco niveles. En el interior, se puede visitar la iglesia de Santa María la Mayor, un templo románico que aún conserva sus tres naves y bóvedas de cañón.
Este castillo, restaurado en 1945, hoy funciona como albergue juvenil. Lo mejor de la visita es el ambiente de historia viva que rodea cada rincón, ideal para aquellos que quieren sentir la herencia medieval en plena naturaleza.


2. Castillo de Puebla de Alcocer (Badajoz)
La fortaleza de Puebla de Alcocer es otro imponente castillo que domina la región desde lo alto de un cerro. Construido en los siglos XI y XV, fue remodelado por Don Gutiérrez de Sotomayor, maestre de la Orden de Alcántara. La torre del homenaje, de planta cilíndrica, guarda el escudo de armas de las familias Zúñiga y Sotomayor, y ofrece unas vistas impresionantes de las comarcas de La Serena y La Siberia.
Uno de mis momentos favoritos aquí fue disfrutar de la tranquilidad y vistas de los paisajes naturales a los pies del castillo. Además, hay un restaurante cercano que permite disfrutar de estas panorámicas mientras se degusta la gastronomía local.
3. Castillo de Fregenal de la Sierra (Badajoz)
El Castillo de Fregenal de la Sierra tiene una rica historia que se remonta al siglo X. Aunque fue destruido por Pedro I, el Cruel, en el siglo XIV, fue posteriormente reconstruido. Su estructura incluye un doble perímetro amurallado y un aljibe del siglo XI. En el interior también podemos observar restos de una alberca de origen islámico, conocida como el baño del Moro.
Este castillo es único, ya que su ambiente todavía refleja ese carácter defensivo. En el recorrido te encuentras en cada esquina con detalles que evocan la resistencia que tuvo en las guerras contra Francia y Portugal.
4. Castillo de Alconchel (Badajoz)
El Castillo de Alconchel, también conocido como Castillo de Miraflores, se encuentra en la cima del Cerro de Miraflores. Fue originalmente construido por el rey Alfonso Enríquez de Portugal en el siglo XII, y ha pasado por distintas manos, incluyendo la Orden de Alcántara. La subida al castillo es una experiencia inolvidable, y la fortaleza conserva elementos de su origen árabe y cristiano.
Este castillo es ideal para aquellos que disfrutan de una buena caminata para llegar a un mirador natural, desde donde se puede contemplar toda la comarca.
5. Castillo de Nogales (Badajoz)
La fortaleza medieval de Nogales es otro castillo digno de mención. Su construcción en el siglo XV sobre un cerro le da una ventaja estratégica, y desde sus torres se pueden divisar kilómetros de terreno a la redonda. El castillo cuenta con torres cilíndricas rematadas en almenas, ofreciendo una vista que abarca tierras de cultivo y bosques en todas direcciones.
Para mí, lo más impactante de este castillo fue la arquitectura, que mezcla estilos árabes y góticos. Además, el acceso al castillo es muy seguro y está bien señalizado, lo que facilita la visita. Aquí puedes aprender sobre cómo esta fortaleza jugó un papel importante durante las guerras con Francia y Portugal.
6. Castillo de Granadilla (Cáceres)
Pasamos a Cáceres para visitar el Castillo de Granadilla, una fortaleza del siglo XV que se levanta en el pueblo abandonado de Granadilla, a orillas del embalse de Gabriel y Galán. Construido por Don Fernando Álvarez de Toledo, el castillo es uno de los pocos que mantiene su muralla original y un antemuro o barbacana hacia el interior del recinto, lo que es bastante raro.
Este es un lugar que provoca una mezcla de emociones, al caminar por un pueblo fantasma que quedó aislado en una península tras la construcción del embalse. Sin duda, una visita que te hace reflexionar sobre el paso del tiempo.
7. Castillo de Mirabel (Cáceres)
El Castillo de Mirabel, erigido en el siglo XV, está ubicado en el Cerro del Acero. La fortaleza fue construida durante la Reconquista y ha sido testigo de batallas y conquistas. Está en un punto estratégico que lo hacía indispensable en la defensa de la región.
Los restos del castillo dan una idea de cómo era la vida en la Edad Media y, aunque no se conserva en su totalidad, la visita ofrece una visión única de los métodos de construcción de la época.
8. Castillo de Belvís de Monroy (Cáceres)
El Castillo de Belvís de Monroy es otro excelente ejemplo de la arquitectura defensiva extremeña. Construido en un cerro, el castillo está rodeado por murallas con torreones semicirculares y otras torres que delimitan su perímetro. Este castillo tiene un ambiente que inspira respeto, ya que cuenta con una mezcla de construcciones residenciales y defensivas.
Recorrer sus murallas y dependencias me dio una idea clara de cómo se vivía en una fortaleza de este tipo. Su buen estado de conservación y la protección histórica que ha recibido hacen de este castillo una visita obligada en la ruta.
9. Castillo de Trujillo (Cáceres)
El Castillo de Trujillo es una joya medieval que se alza en la cima de la ciudad. Fue construido en el siglo XI sobre una fortaleza árabe y ha mantenido gran parte de su estructura original. Su torre del homenaje, los patios y el aljibe ofrecen una excelente vista de la ciudad y sus alrededores.
Este castillo también es famoso por su aparición en la serie Juego de Tronos, y ofrece una ruta para conocer los lugares donde se filmaron escenas de la serie, lo cual agrega un atractivo adicional para los fanáticos de la ficción histórica.
10. Castillo de Coria (Cáceres)
Finalizamos nuestra ruta con el Castillo de Coria, una fortificación mandada construir en 1472 por García Álvarez de Toledo. El castillo tiene un diseño gótico con una torre del homenaje de forma pentagonal. Aunque es una propiedad privada y no puede visitarse en su interior, su estructura externa y los patios mudéjares hacen que valga la pena una visita.
Su arquitectura y los detalles renacentistas, como el mirador y el jardín, lo convierten en una de las fortalezas más impresionantes de Extremadura. La presencia de la Casa de Alba aquí nos recuerda la importancia de este castillo en la historia local.
Esta ruta por los castillos de Extremadura es una invitación a sumergirse en la historia, la cultura y el patrimonio medieval de la región. Desde la fortaleza de Luna en Alburquerque hasta el Castillo de Coria, cada castillo ofrece una experiencia única y una perspectiva sobre las vidas de quienes los habitaron hace siglos. Extremadura es el destino perfecto para quienes buscan viajar en el tiempo y disfrutar de vistas imponentes y relatos fascinantes.
¿Te animas a descubrirlos?